Las rosas liofilizadas, mas conocidas como rosas eternas, nos permiten realizar pequeños detalles muy caprichosos y totalmente únicos. En la floristería preparamos sólo 2 arreglos florales iguales, los demás serán de la misma colección pero diferentes.
En este caso necesitamos: base de cristal, arena de color, palos de canela, detalles secos, lana, pistola de silicona, taipe,corcho y la rosa liofilizada.
Es mas práctico forrar el corcho y pegarlo en la base. Calentar el cristal antes de aplicar la silicona da mejor resultado. Hay que dejar un espacio libre para la arena de color y pequeños detalles secos.
Atar los palos de canela con lana, mejor el mismo color que la arena, pegar una flor de madera. Los tamaños 8-5-3 siempre son los fáciles. Rellenamos el interior libre de la base teniendo en cuenta que hay materiales que pueden sobresalir y formar parte también del exterior.
Los palos de canela los hincamos verticales y no equidistantes entre ellos. La rosa liofilizada la colocamos en el punto óptimo. El resto de materiales acompañan a la rosa pero no la tapan ni le hacen “la competencia”. La pistola de silicona es muy práctica para pegar los materiales pero es mejor no usarla sobre la rosa liofilizada.
Si utilizamos pequeñas hojas verdes artificiales dulcificamos el arreglo y pasa a ser de rústico a primaveral
Dos ejemplos de atractivos detalles con rosas liofilizadas.